El cuadro burgalés disputó un partido muy completo, con distintas fases de dominio, que acabó llevándose el bloque andaluz para celebrar su ascenso a la liga Asobal

El UBU San Pablo peleó hasta el final (23-22) un encuentro en el que el empuje cidiano y los nervios de los andaluces a punto estuvieron de costarle la celebración del ascenso a los últimos. El duelo se desarrolló con arreones de uno y otro oponente por lo que, a pesar de que Iberoquinoa llevó la voz cantante en gran parte de los minutos, no terminaba de romper el duelo y los rojinegros tuvieron opciones de puntuar hasta el final.

El bloque cidiano saltó a la cancha del Fernando Argüelles con el ánimo de no dejarse influir por el ambiente exterior en el que se anticipaba una celebración de ascenso más que ansiada en Antequera. Así, los rojinegros salieron con un siete inhabitual para sorprender a los malagueños, de modo que el primer parcial fue para los burgaleses con un 0-4 de inicio. Se notaba la ansiedad en el conjunto local, que no se encontraba cómodo en ataque. También, acrecentada por la defensa 5-1 alineada por Nacho González que pilló despistados a los andaluces.

Mile se hizo presente para amargar los primeros minutos del bloque antequerano y tampoco ayudó la exclusión de Santamaría en el minuto 8. Así, en el 12:44, con un 2-7, el Lorenzo Ruiz pidió un tiempo muerto orientado a cambiar la dinámica del partido, muy negativa para sus intereses hasta ese momento. La reacción fue inmediata y, con dos tantos seguidos, la distancia se redujo al 4-7 para alegría de los 700 aficionados congregados en el pabellón.

El UBU San Pablo encadenó, en ese punto, varios ataques fallidos, incluidos dos penaltis. La sequía se prolongó casi siete minutos hasta que Ernesto anotó para cambiar el dígito en el tanteo a ocho goles. Acto seguido, Soto igualó la contienda, lo que llevó a Nacho González a parar el partido. La arenga no surtió el efecto deseado y, de hecho, espoleó más a los locales, que empezaron a sentirse cómodos sobre el parqué. En el 23 de juego la ventaja para Antequera era ya de cuatro tantos (12-8). A la escalada local se sumaron las dos exclusiones seguidas en las filas castellanas -Claudio y Cantore- que limitaron las opciones de reacción de los rojinegros en el tramo final de la primera parte. Con 14-11 se llegó al descanso.

En la reanudación parecía que los cidianos recuperaban el ímpetu del inicio del encuentro, pero el cuadro andaluz tenía claro que hoy sellaría su billete a Asobal y no estaba dispuesto a que sus planes cambiaran. El cuadro del Fernando Argüelles salió como un ciclón para marcar distancias y tranquilizar los corazones de sus aficionados que acudieron a su templo preparados para la fiesta.

Mediada la segunda parte, las revoluciones se frenaron y el choque se igualó en fuerzas, también debido a la nueva defensa 5-1 de los burgaleses que dificultaba el ataque posicional antequerano. Burgos recortaba distancias hasta los tres goles de diferencia (20-17), pero no terminaba de inquietar los intereses locales. El portero andaluz, Moyano, bajaba la cancela en los momentos en los que su equipo sufría, pero los nervios volvían a hacer acto de presencia en Los Dólmenes y los cidianos aprovecharon las pérdidas en el cuadro verde para situar el tanteo en un 20-19 que obligaba al técnico local a parar la contienda. Sus pupilos respondieron con dos tantos seguidos pero los burgaleses reaccionaron con tres dianas que igualaron el partido a 22 a falta de tres minutos. La placidez del inicio del segundo periodo desapareció para dar pie a un final de infarto. En el 58, Dalmau vio dos minutos y el penalti lo transformaba Soto para colocar el 23-22. Nacho González preparó jugada a falta de minuto y medio, pero el ‘fly’ de Pinillos a Javi Rodríguez no salió. De igual modo, Lorenzo Ruiz quiso apurar su posesión y paró el crono para tratar de aprovechar lo mejor posible los últimos 34 segundos, pero el marcador ya no se movería, lo que dio paso a la fiesta en la pista y la grada, que ya respira Asobal.

DECLARACIONES NACHO GONZÁLEZ

«Un partido con muchas alternativas. Yo creo que el inicio y el final con 5-1 ha sido espectacular. Creo que hemos hecho un trabajo defensivo muy bueno. La lástima es que después de que se nos pusiera el partido muy bien en los primeros minutos, con exclusiones y pérdidas de balón ellos han entrado y han llegado a estar por encima. Buen trabajo defensivo, en general. Hemos conseguido robar balones, hemos conseguido correr y luego en ataque nos ha faltado un punto y en los lanzamientos desde el sitio, Moyano ha estado extraordinariamente bien. Y solo felicitar a los jugadores por el esfuerzo realizado y porque todas las alternativas y todas las cosas que hemos trabajado hemos estado muy bien y hemos superado la baja de Josh. También felicitar a Antequera por su merecido ascenso igual que a Torrelavega».